El castillo de Stirling, hogar del misterioso fantasma de la Dama Verde.
En el corazón de las Tierras Altas escocesas existe un lugar donde la historia se entrelaza con la leyenda, donde cada piedra narra historias de reyes y reinas, banquetes y batallas, sueños y poder. Se trata del Castillo de Stirling , una de las fortalezas más majestuosas de Europa, suspendida entre el cielo y la tierra sobre un promontorio volcánico que domina el valle circundante.
Desde aquí arriba, la vista abarca Bannockburn Field, escenario de las hazañas de William Wallace, y Stirling Bridge , donde nació la leyenda de “ Braveheart ”, narrada en la famosa película de 1995.
Un palacio de cuento de hadas en el corazón de EscociaEl magnífico Castillo de Stirling es una de las mayores fortalezas de piedra de Escocia . La ciudad homónima, situada más abajo, que fue la capital del reino, era la residencia predilecta de los monarcas Estuardo , quienes celebraban coronaciones, bautizos y fastuosos banquetes en ella. Fue entre estos muros donde creció María Estuardo, reina de Escocia, quien ascendió al trono con tan solo seis días de vida, coronada en la Capilla Real en 1543.
Recorrer hoy las habitaciones del castillo significa adentrarse en un relato histórico viviente : actores ataviados con trajes de época interpretan a damas, caballeros y sirvientes, recreando la atmósfera del siglo XVI y dando vida a los esplendores de la corte.
Dominando el castillo se alza el Palacio Real, el primer ejemplo de arquitectura renacentista en las Islas Británicas, un lugar donde el arte italiano, el poder y las leyendas escocesas se entrelazan entre frescos y estatuas monumentales. Admire las Cabezas de Stirling , retratos de madera que representan a reyes, reinas y deidades, símbolo del poder de Jacobo V y sus ambiciones europeas, así como los Tapices del Unicornio : siete obras maestras tejidas a mano que narran la caza del unicornio, símbolo perdurable de Escocia.
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El castillo también alberga la Capilla Real , construida en tan solo siete meses para el bautizo de un heredero al trono. Aún conserva una atmósfera solemne que evoca el esplendor (y los secretos) de la corte escocesa. Tampoco se pueden perder las cocinas del castillo, donde se celebraban los banquetes más suntuosos durante las grandes festividades de la corte.
Luego están las bóvedas del palacio , los talleres de los maestros artesanos donde nacieron las esculturas y las vestimentas de los soberanos, y el Museo Regimental que cuenta historias de héroes y batallas escocesas.
El exterior del Castillo de Stirling también ofrece vistas impresionantes: los Jardines de la Reina Ana son un oasis de paz con vistas a las murallas del sur, mientras que el Nudo del Rey, un antiguo jardín inspirado en la Mesa Redonda, conserva el mito del Rey Arturo.
Desde el castillo, se pueden contemplar algunas de las vistas más evocadoras e inolvidables de la ciudad y las Tierras Altas de Escocia . Además de la ciudad de Stirling y sus monumentales cementerios, se divisa a lo lejos el mausoleo de Wallace , el campo de batalla de Bannockburn y el puente de Stirling, donde comenzó la leyenda de William Wallace . Fue allí donde derrotó al ejército inglés de Eduardo I de Inglaterra. Su historia se narra en la famosa película « Braveheart », protagonizada por Mel Gibson.
La leyenda de la dama verdeNo se trata solo de historia y vestigios del pasado. El Castillo de Stirling está profundamente ligado a una leyenda de fantasmas : dentro de sus muros parece que el espectro más famoso de Escocia , la " Dama Verde ", ronda por allí.
Se dice que fue sirvienta de la reina María Estuardo, quien una noche la salvó de un incendio en su habitación. Pereció en las llamas, pero desde entonces se aparece vestida de verde , deslizándose por las escaleras del castillo o vigilando a todos desde lejos. Sus apariciones se consideran presagios, hasta tal punto que, con el paso de los años, se la ha relacionado con supuestos incendios o acontecimientos dramáticos.
Visitar Stirling es como entrar en un cuento de hadas esculpido en piedra: un lugar donde pasado y presente coexisten, entre arte, leyenda y orgullo nacional.
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El Castillo de Stirling es un monumento antiguo protegido y gestionado por Historic Environment Scotland. Se puede visitar con una visita guiada, a menudo con personajes caracterizados como figuras históricas (también se puede adquirir el Stirling City Pass, que permite visitar muchas de las principales atracciones). Los niños también se lo pasarán en grande: pueden vestirse con trajes de época y tocar instrumentos medievales.
Llegar al Castillo de Stirling es fácil: en coche , siga la A9 o la M9 hasta el centro de la ciudad. Hay un aparcamiento alternativo al del castillo, aunque las plazas son limitadas.
Varias líneas de autobús conectan Stirling con los pueblos cercanos y el centro histórico, con paradas a pocos minutos a pie del castillo. En tren , la estación de Stirling ofrece conexiones frecuentes con Edimburgo y Glasgow : desde el centro de la estación, un paseo de 15 minutos le llevará directamente a la imponente fortaleza.
