Desde Canadá hasta los Alpes japoneses: estos son los mejores destinos para ver el 'foliage' de otoño

Decir adiós al verano nunca es fácil, pero el otoño también es una época del año magnífica para poder ser testigos de otro tipo de espectáculos de la naturaleza. Para todos aquellos que disfrutan yendo al parque del Retiro en Madrid a ver como los árboles se tiñen de tonos rojizos y amarillentos, hay infinidad de destinos lejos de la capital de España que les dará una nueva perspectiva de la espectacularidad de la estación otoñal.

El conocido como 'foliage', ese fenómeno natural en el que las hojas de los árboles comienzan a secarse y a adoptar unos colores cobrizos, es una de las estampas más apasionantes que se pueden contemplar en el mundo, y alrededor del planeta hay varios destinos ideales para verla en su máximo esplendor. Desde los parajes más inhóspitos de Canadá hasta los parques de Tokio, en el globo terráqueo hay lugares donde el otoño es sin duda la estación más especial.

Si hay un país que se caracteriza por tener unos paisajes naturales que parecen sacados de una película es Canadá, y la joya de la corona es sin duda el majestuoso Parque Nacional Banff, un descomunal entorno situado en la parte canadiense de las Montañas Rocosas que brilla con un fulgor especial en otoño. Los millones de árboles que crecen entre ríos, lagos y altas cumbres tiñen de amarillo este paraíso natural.

A lo largo y ancho del parque nacional más antiguo de Canadá, los más aventureros podrán contemplar estampas únicas e irrepetibles. Por ello, los que anhelen ver el 'foliage' otoñal en su máximo esplendor, deben cruzar el Atlántico y viajar miles de kilómetros hasta uno de los lugares más mágicos del globo terráqueo; desde luego, no lo olvidarán jamás.

También en el continente americano se ubica otro de los mejores lugares de todo el planeta para vivir el otoño de manera mágica. El noreste de Estados Unidos es una zona en la que esta época del año se vive de manera muy especial, y es que en estados como New Hampshire o Vermont, el paisaje se torna en un cuento de hadas; de hecho, las típicas películas de sobremesa suelen ambientarse en esta parte del país.

Pueblecitos llenos de encanto, lagos que reflejan las montañas y árboles que se vuelven rojos y naranjas esperan a los turistas que se adentren en esta parte de Estados Unidos, lejos del bullicio de las grandes ciudades de la costa este como Boston, Filadelfia o Nueva York. Por ello, es un punto muy a tener en cuenta si se quiere ver el 'foliage' en su máxima expresión.

A poco más de 200 kilómetros de Tokio se ubican los conocidos como 'Alpes japoneses', conformados por las montañas Hida, Akaishi y Kiso. Alrededor de sus cumbres, las más altas del país nipón después del monte Fuji, hay miles de árboles que entre septiembre y diciembre se transforman por completo para crear un paisaje espectacular.

De esta manera, correr algunas de las numerosas rutas de senderismo que discurren por el entorno es una alternativa perfecta para disfrutar de la estación otoñal. Además, en la propia capital japonesa también se celebran varios eventos para conmemorar la llegada del otoño, por lo que además es una época ideal para viajar al país del sol naciente.

Mucho más cerca de España se encuentra Islandia, que es uno de los pocos países en los que su naturaleza es espléndida todos y cada uno de los días del año. La mayoría viaja a la 'Isla de Hielo' en invierno o en verano, pero pocos saben que en otoño hay enclaves que también sorprenden a quienes los visitan.

Un claro ejemplo es la cascada Hraunfossar, ubicada en la parte más occidental del país y que se torna todavía más apasionante en el último trimestre del año. De origen volcánico, este salto de agua es una de las muchas maravillas naturales que esconde Islandia, aunque en otoño es cuando se puede contemplar de manera más singular.