Museo del Cerro de San Vicente: un 'paseo' por el ayer y hoy de Salamanca

El Museo del Cerro de San Vicente es un nuevo espacio expositivo con el que conocer la historia de Salamanca desde el lugar exacto donde comenzó todo. Ubicado en lo alto de un promontorio que domina el valle del Tormes, se presenta como una propuesta contemporánea, interactiva y divulgativa. A través de un recorrido dividido en diez etapas, permite comprender el origen y evolución de la ciudad, conectando la historia con el presente de manera amena y dinámica.
La visita comienza con un audiovisual introductorio que sitúa al visitante en el contexto histórico del cerro, considerado el punto fundacional de Salamanca, habitado desde la primera Edad del Hierro. A partir de ahí, el recorrido plantea una reflexión sobre cómo se conoce y se aprende de una ciudad, para después adentrarse en una línea del tiempo, mapas históricos, planos urbanos y piezas singulares como la mítica vista de Salamanca pintada por Anton van den Wyngaerde en 1570. Una propuesta envolvente narra la transformación urbana de la ciudad desde sus orígenes hasta la actualidad.
El itinerario profundiza en los restos encontrados en este lugar, el poblado de la primera Edad del Hierro y el desaparecido monasterio de San Vicente, vinculado a la red conventual que durante siglos marcó el pulso religioso, económico y social de Salamanca. La exposición continúa con una sorprendente colección de objetos históricos, como el maletín del duque de Wellington, una maqueta del pabellón real de la Plaza Mayor diseñada por García de Quiñones, restos y armas de la Batalla de los Arapiles, o una obra contemporánea del artista Juan Figueroa, que dialoga con el pasado desde una perspectiva actual. Uno de los espacios más llamativos propone un encuentro entre la arqueología científica y el arte, donde la creatividad y el rigor académico se dan la mano para despertar el interés del visitante.



Otro de los capítulos se dedica a la Batalla de los Arapiles, una de las más decisivas de la Guerra de la Independencia. También se repasan momentos críticos para la ciudad, como la riada de San Policarpo, el terremoto de Lisboa, los efectos de la Desamortización o el impacto de las guerras. En el tramo final, el visitante se adentra en la historia más reciente, marcada por el crecimiento urbano y el surgimiento de barrios populares como el de San Vicente, conocido también como el de Las Maravillas, cuyo pasado y presente cierran la experiencia con una mirada al futuro.
El Museo del Cerro de San Vicente se suma a la ya extensa y atractiva oferta cultural de Salamanca. Supone una oportunidad perfecta para descubrir el alma de la ciudad desde sus orígenes y conocer la Salamanca Invisible. El enclave del Cerro de San Vicente reúne además los restos arqueológicos del antiguo poblado de la ciudad. Estos corresponden a una porción del poblado asentado en el Cerro de San Vicente durante la primera Edad del Hierro, entre los siglos VII y IV a.C. Se muestran cuatro viviendas completas y hasta nueve estructuras domésticas auxiliares (silos, despensas, graneros…) vinculadas a las construcciones principales que se distribuyen en dos bandas alineadas en torno a un espacio de tránsito o 'calle', buena muestra de la arquitectura de barro y adobe que caracteriza a esta cultura. Además, el parque botánico de las laderas del cerro conserva las interesantes infraestructuras auxiliares del monasterio de San Vicente asociadas al uso tradicional de esta ladera como terreno de cultivo. Y junto a ello, los magníficos miradores desde los que disfrutar de las vistas de la ciudad.
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