El castillo de 200 habitaciones, el que fue escenario de series y películas y el primero con electricidad

Castillos en lo alto de una montaña (o pequeña colina) dominando un valle; castillos rodeados de agua; edificios preservados, restaurados, que conservan tapices, muebles, armas, y otros en ruinas, que solo guardan historias.
Un viaje a Europa es la oportunidad para visitar castillos y palacios, y adentrarse en un pasado de nobles, guerras, feudos, leyendas y realeza. Algunos castillos son súper famosos, como los del Valle del Loira (Francia) o el de Neuschwanstein cerca de Füssen, en Alemania, que parece escenario de un cuento de hadas y, dicen, sirvió de inspiración para el castillo de uno de los parques de Disney.
Aquí les propongo darnos una vuelta por una pequeña selección de castillos europeos, quizá no tan famosos como los mencionados, pero con el encanto de ser testigos de otros tiempos. Cada uno podrá sumar su favorito, aquel que le fascinó o el que espera conocer.
La familia Ahlefeldt-Laurvig-Bille, dueña y habitante del castillo, abre las puertas para que los visitantes exploren los rincones y disfruten de los jardines y áreas de juegos para chicos, además de los museos.
Egeskov, de la familia Ahlefeldt-Laurvig-Bille.Foto Shutterstock
Egeskov es un castillo de casi 500 años, pero “viviente”.
“Durante el día, el castillo está abierto para conocer y experimentar la historia del lugar. Pero por la noche, las puertas de las habitaciones privadas de la familia se abren y todo el castillo se convierte en su hogar”, explican el conde Michael Ahlefeldt -Laurvig-Bille y la princesa Alexandra Zu Sayn-Wittgenstein-Berleburg, dueños, que dan la bienvenida en la web oficial y hacen hincapié en que se trata de un lugar en constante evolución.
Varios clanes nobles y poderosos de Dinamarca habitaron este lugar, que nació como casa solariega. El castillo fue construido por Frands Brockenhuus en 1554 en medio de un pequeño lago y con un objetivo defensivo –como dan cuenta su muralla exterior, troneras y aspilleras-, pero hoy muestra un costado más amable e idílico.
En medio de un lago y originariamente con objetivo defensivo. Foto Shutterstock
En cuanto a su nombre, Egeskov significa “bosque de robles” en danés: fue la madera usada para las grandes vigas que lo sostienen.
En 1784 lo adquirió Henrik Bille y desde hace 100 años está en la familia Ahlefeldt-Laurvig-Bille. La apertura a los visitantes fue un proceso que comenzó ya en 1960, cuando se podían recorrer los jardines.
En los museos hay atractivas exposiciones de camping, autos clásicos, bomberos, arte y hasta una increíble casa de muñecas (el Palacio de Titania), entre otras cosas.
- Cuánto cuesta. El castillo abre de abril a octubre. En invierno solo pueden visitarse los museos. El ticket cuesta poco más de US$ 24, incluyendo el castillo, el parque y las exhibiciones; sin el castillo, US$ 22 (egeskov.dk).
A menos de cinco kilómetros del pueblo de Loarre y a 1.071 metros de altura, se considera que este castillo es la fortaleza románica mejor conservada de Europa. Es Monumento Nacional.
Fortaleza románica mejor conservada. Foto Shutterstock
Construido a finales del siglo XI, fue una pieza esencial y estratégica para el rey Sancho III el Mayor en la reconquista cristiana de esta Tierra Llana o Plana a los musulmanes.
En tiempos más contemporáneos sirvió como escenario de documentales, series como El Ministerio del Tiempo, y películas como Cruzada, de Ridley Scott, protagonizada por Orlando Bloom.
Loarre, escenario de series, documentales y películas. Foto Shutterstock
Durante la visita hay que prestar atención a su imponente muralla y sus torres -incluyendo la torre albarrana-, una pequeña capilla, la cripta de Santa Quiteria (en la entrada) y la iglesia de San Pedro con su cúpula.
- Cuánto cuesta. La entrada general es de 6,80 euros. Con visita guiada, 8,80 euros (castillo-loarre.es).
“Les doy una cálida bienvenida al Castillo de Dunrobin, hogar de mis antepasados durante más de setecientos años. Me enorgullece que personas de todo el mundo nos visiten y disfruto compartiendo el magnífico castillo y sus jardines”. Con la firma de Lord Sutherland, esto es lo primero que se lee en la web oficial de este castillo de 189 habitaciones que, además, ostenta varios “títulos”: la mansión más septentrional de Escocia, la más grande de las Tierras Altas del Norte y una de las casas habitadas de forma continua más antiguas de Gran Bretaña.
Dunrobin, la mansión más grande de las Tierras Altas. Foto Shutterstock
Al norte de los pueblos Golspie y Dornoch, con vista al estuario de Moray, la parte más antigua del castillo data de 1275. El diseño de los jardines, inspirado en Versalles, es del arquitecto Sir Charles Barry, contratado en 1845 para remodelar el castillo.
La visita incluye un museo –con colecciones como la de piezas etnográficas de diferentes lugares del mundo y una sección dedicada a la geología- en lo que originalmente era la residencia de verano.
En la Primera Guerra Mundial funcionó como hospital. Foto Shutterstock
Vale saber que en la Primera Guerra Mundial, el castillo fue hospital naval y de 1965 a 1972 funcionó como internado para varones.
- Cuánto cuesta. Abre del 1 de abril al 31 de octubre. La entrada incluye castillo, museo, cetrería (vuelo de aves rapaces) y jardines. Cuesta US$ 21 para mayores de 17 años (www.dunrobincastle.co.uk).
Dunrobin abre entre abril u octubre. Foto Shutterstock
Fue construido por iniciativa del primer rey de Rumania, Carol I, como residencia de verano en Sinaia. La ceremonia de colocación de la primera piedra de la residencia fue una fiesta, en agosto de 1875. Con su propia central eléctrica, aseguran que fue el primer castillo de Europa con electricidad y ascensor.
Peles, construido por iniciativa del primer rey de Rumania. Foto Shutterstock
Fue residencia real hasta 1947. Luego se nacionalizó y comenzó a funcionar como museo y tuvo varias idas y vueltas. Si bien hoy el castillo es propiedad de la familia real (Margarita de Rumania), lo administra el Ministerio de Cultura y Patrimonio Nacional.
Los visitantes pueden disfrutar de los bellos jardines y el exterior del castillo (gratis) y también conocer sus salones y habitaciones (con pago de entrada). Entre las colecciones hay muebles, instrumentos musicales, cristalería, armas, cerámicos, textiles, pinturas y más.
- Cuánto cuesta. Entrada para adultos, US$ 22 con acceso a planta baja y primer piso (peles.ro).
Fue residencia real hasta 1947. Foto Shutterstock
Tiene todo lo que uno quiere ver en una fortaleza medieval: torres y murallas, fosos y puentes levadizos. En la provincia de Utrecht, a 45 minutos en auto de Ámsterdam, Kasteel de Haar es el castillo más grande y lujoso de los Países Bajos.
Reconstruido por el arquitecto Pierre Cuypers, quien diseñó el Rijksmuseum y la Estación Central de Ámsterdam. Foto Shutterstock
Su historia arrancó en el siglo XIII, con la construcción de la casa medieval De Haar. En el siglo XV pasó a manos de la familia van Zuylen, pero tras años de guerras y otras complicaciones, quedó en ruinas hasta que a fines del siglo XIX, el barón Etienne van Zuylen van Nijevelt y su esposa Hélène de Rothschild decidieron reconstruirlo junto al arquitecto Pierre Cuypers, conocido por los diseños del Rijksmuseum y la Estación Central de Ámsterdam.
El resultado de un proyecto que se inició en 1892 y se extendió a lo largo de 20 años fue un castillo con mucho lujo para la época, con 200 habitaciones y casi 30 baños, agua corriente, calefacción central, electricidad, baño turco, cocina de última generación y hasta ascensor.
Lugar de encuentro de personajes famosos, invitados por la familia. Foto Shutterstock
La familia solía invitar amigos nobles y adinerados, algo que en pleno siglo XX, retomó Thierry -nieto de Etienne- convirtiéndolo en un lugar de encuentro con personajes como Coco Chanel, María Callas, Brigitte Bardot, Roger Moore o Yves Saint Laurent.
Desde 2000, el castillo está en manos de la Fundación Kasteel de Haar, que se ocupa de su preservación. La familia tiene el derecho a residir aquí un mes, en septiembre, como un homenaje a aquellos encuentros legendarios de Thierry (murió en 2011) y sus antepasados.
- Cuánto cuesta. La entrada que incluye castillo y parque cuesta 20 euros (www.kasteeldehaar.nl).
Dentro del grupo de Palacios Reales de Suecia, el Castillo de Gripsholm tiene 500 años de historia y está a 70 km de Estocolmo, cerca de la reserva natural Hjorthagen y junto a la localidad de Mariefred (tiene menos de 4.000 habitantes).
A 70 km de Estocolmo. Foto Shutterstock
Construido en el siglo XVI por orden del rey Gustav Vasa como parte de un nuevo sistema de defensas, el nombre proviene de un personaje medieval, Bo Jonsson Grip, quien levantó el primer castillo unos siglos antes.
Gripsholm aún conserva habitaciones históricas, como la cámara del Duque Carlos, la más famosa. Imperdible el Teatro Gustav III, en una de las torres redondas renacentistas del castillo, y considerado “uno de los teatros del siglo XVIII mejor conservados de Europa”, la Colección Estatal de Retratos de Suecia y sus diversas salas que constituyen una muestra del diseño interior sueco del siglo XVI al XIX, con muebles y arte decorativo.
Suele tener una agenda de conciertos y exposiciones temporales como “Hans Hammarskiöld 100 años”, sobre uno de los fotógrafos suecos más reconocidos de la segunda mitad del siglo XX.
Gripsholm tiene uno de los teatros del siglo XVIII mejor conservados de Europa. Foto Shutterstock
- Cuánto cuesta. Cuesta casi US$ 16. Hay visitas guiadas privadas que se contratan aparte y duran 45 minutos (www.kungligaslotten.se/).
El antiguo castillo fortificado tiene 950 años, está a 40 km de Salzburgo y se destaca sobre una roca, dominando la ciudad de Werfen y el valle del río Salzach.
La primera fortificación data de 1075–1078. Foto Shutterstock
La primera fortificación data de 1075–1078 y fue construida por orden del arzobispo Gebhard de Salzburgo. A lo largo de los siglos fue destruido y reconstruido, se usó como pabellón de caza, residencia real, sitio de entrenamiento del nazismo y escuela de gendarmería.
Desde 1987 es una atracción turística y hoy la propuesta es recorrer el castillo, conocer la taberna y su tienda, además de disfrutar de vuelos de halcones y una interesante agenda de actividades.
Es atracción turística desde 1987. Foto Shutterstock
- Cuánto cuesta. Entradas, desde 13,90 euros. Hay tickets que incluyen visitas guiadas y ascensor (www.burg-hohenwerfen.at).
Es Patrimonio de la Humanidad y está sobre una colina, a menos de 20 km de Andria, en el Parque Nacional de Alta Murgia, sur de Italia. Esta fortaleza medieval del siglo XIII es uno de los íconos de Puglia (Apulia, sobre el Adriático).
Uno de los íconos de Puglia. Foto Shutterstock
Su construcción a partir de 1240, la impulsó Federico II, Emperador del Sacro Imperio Romano Germánico y rey de Sicilia, muy culto, amante de la matemática, la poesía, la astronomía y la filosofía.
El castillo se destaca por su planta octogonal, su rigor geométrico y matemático, la combinación de una variedad de elementos estilísticos y su ubicación, que está pensada por los efectos de luces y sombras según la época del año.
- Cuánto cuesta. Ingreso, 7 euros (www.italia.it/es/apulia/fortaleza-castel-del-monte).
Clarin