A partir de ahora ya no se podrá vender alcohol en Oporto por las noches

Oporto se considera la puerta de entrada a una de las regiones vinícolas más espectaculares del noreste de Portugal : el Valle del Duero. Oporto también es un lugar muy vinícola; al otro lado del río se encuentran las famosas bodegas de Vila Nova de Gaia, donde aún hoy se añeja el vino de Oporto.

A pesar de la afición al vino, la venta de alcohol en la vía pública de Oporto está estrictamente prohibida. Las normas se establecen en el "Reglamento da Movida do Porto". La venta de alcohol está prohibida entre las 21:00 y las 8:00. Solo se permite en las terrazas con permiso y en funcionamiento.

También está prohibido salir, por ejemplo, de un restaurante, con vasos o botellas de bebidas alcohólicas en la calle durante este horario. Estas normas se aplican a toda la ciudad. Solo los cafés, bares, restaurantes y discotecas con licencia pueden vender alcohol después de las 21:00 h, pero, como ya se mencionó, no para llevar.

Las medidas buscan frenar el llamado "fenómeno del botellón". Algunos lo describen como reuniones espontáneas que forman parte del encanto de Oporto, mientras que otros lo ven como simples fiestas para beber.

En una entrevista con "The Portugal News", la concejala Filipa Correia Pinto prometió inspecciones muy estrictas y sanciones severas. Añadió que esto es necesario para fortalecer la seguridad ciudadana y garantizar el orden en los espacios públicos.

Oporto es conocido por sus numerosas bodegas de vino de Oporto.

Fuente: imago images/imagebroker

En determinadas circunstancias, un negocio puede incluso ser clausurado inmediatamente si incumple la prohibición del alcohol. Ricardo Tavares, presidente de la Asociación Portuguesa de Bares y Discotecas, duda que las nuevas normas resuelvan el problema del consumo de alcohol en público. "No creo que esto suponga ninguna mejora para la ciudad ni para sus residentes desde una perspectiva operativa. Solo causará más problemas a los dueños de los negocios, que ya tienen muchos", declaró.

Miguel Camões, presidente de la Asociación de Bares y Discotecas de Oporto, declara a Portugal Pulse: «El problema de los botellones es significativo porque suelen ser bebidas que la gente trae de casa o compra en el supermercado durante el día. Por lo tanto, no son los bares los que venden estas bebidas para el consumo en la calle».

En las próximas semanas y meses se verá hasta qué punto la nueva prohibición del alcohol mejorará la situación en Oporto.

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reportero de viajes